Enmendando el Cora

¿Nacimos para brillar? Todos llegamos al plano terrenal con la intención genuina y nata de brillar por el hecho de la misma existencia, en realidad el cuestionamiento debería venir cuando no lo estoy haciendo.Cada parte de nuestra existencia y la expresión de la misma ya es por si sola una obra arte, por lo tanto es brillante y autentica. Sin embargo en coacciones el trabajo esta en poder estar en contacto con aquello que me permite contactar con mi fuente de luminosidad que es lo que me lleva a brillar y eso con lleva a al reto de buscar la plenitud, goce del ser y del alma.

Todo aquello nos aleja de contactar con nuestro ser es una anestesia, aquello que nos impide estar en el presente o bien poder crecer y florecer es lo que nos evita poder conocer nuestro ser.

Para lograr acompañar en libertad a nuestro ser y las personas que nos rodean es necesario primero que nada poder hacer a un lado los prejuicios y las etiquetas, ya que ahí inicia lo que rompe el vinculo del acompañamiento El lograr ponernos a disposición del otro y que necesita la otra persona y no asentar las cosas desde lo que seria mi carencia. En ocasiones preguntar te da las respuestas necesarias. Dejando a un lado el ser perfectos y solo ser humanos compasivos y empáticos, acompañándonos desde el alma en esta experiencia terrenal.

La reconstrucción de vidas de pareja donde alguno ya hijos o bien ambos, ya es una experiencia nueva ya que ambos traen tanto heridas, como aprendizajes, ya se ponen limites desde otro punto, sabiendo con lo que puedes y con aquello que ya no quieres repetir.

Vamos al mundo con todo lo que nuestra familia nos impregna; creencias, hábitos, manera de relacionarnos. Para lograr evolucionar requerimos hacer introspección y tomar la decisión de hacer lo diferente cuando algo nos incomoda.Ya que al final llevamos a la familia en el ADN, en corazón y en nuestra sombra y con eso no vinculamos, considero que es indispensable crear conciencia.