23. Enrique Pichardo - El otro lado del espejo
Pichardo - pintor - Desde niño, usó la creatividad como un refugio, un juego que lo ayudaba a distraerse del mundo. Su evolución en el arte comenzó en el teatro, y ahí, en el caos de la juventud, vivió su propia batalla. Como él dice, los 20’s son una zona de guerra: no sabes quién eres, te caes, te levantas, no sabes quién eres o estás en ese descubrimiento pero muchas veces, como en su caso en medio de esta búsqueda puedes caer en una depresión. Así dentro de ese caos, escuchó una voz interior que le recordó algo esencial: si volvía a crear como lo hacía de niño, podía reencontrarse consigo mismo y podía volver a jugar como antes.Hablando del sistema, su paso por la universidad de arte fue una decepción. No soportaba que le dijeran cómo hacer las cosas porque, para él, el arte debía ser un juego, no una imposición. Da acuerdo a esta filosofía nos contó que se identifica con artistas que están conectados con su niño interior, aquellos que pintan y crean desde la diversión. Y como alguien de naturaleza melancólica, él mismo necesita ese espacio para jugar con colores y encontrar momentos de alegría.El dice que su vida es “aburrida”, pero en realidad, ha encontrado una felicidad tranquila, una paz que le permite construir. Ha creado su mundo y todo lo demás, como él dice, “se puede ir por un tubo”. Sin embargo, lo más difícil de este estado de calma ha sido reeducarse. No se trata de lo que ya sabes, sino de lo que crees que sabes. Creció cuestionando el sistema educativo, porque nunca nos enseñan lo más importante: a hacer las paces con nosotros mismos, a aceptarnos, a conocernos de verdad.En la plática también hablamos de cómo podemos desintoxicamos del mundo que nos rodea y de todos los códigos sociales impuestos. Ahora que tenemos más acceso a la información que nunca, ¿por qué nos sentimos más perdidos y deprimidos? ¿Por qué nuestra generación parece estar sin rumbo? Él lo llama la generación del buffet, y su reflexión sobre esto te hará replantearte muchas cosas.Y cuando se trata de crear, su proceso es una metáfora de la vida misma: empieza una obra sin saber a dónde va, dejándose llevar por el camino y confiando en cada decisión del proceso. Porque, como él mismo dice, llegar a la simplicidad es un logro de toda una vida.Sigue más de cerca el trabajo de Pichardo en su INSTAGRAM @pichardo_egeaTambién te invito a seguirme en mi cuenta como @majosah, donde podrás ver las obras o algunas de las referencias de las que hablamos en el podcast, claro! dependiendo del artista invitado.